El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) diseñó y llevó a cabo entre 2023 y 2024 un estudio y una herramienta digital cuyo objetivo fue identificar acciones que permitieran avanzar hacia sistemas alimentarios sostenibles. Esta investigación, titulada “El gran rompecabezas alimentario”, reconoce que los sistemas alimentarios, es decir, la compleja red de actividades que involucra la producción, distribución, comercialización, procesamiento, transporte y consumo de alimentos, tienen un gran impacto global en la naturaleza y el cambio climático, pero que solo pueden volverse sostenibles con soluciones locales. En este sentido, se analizaron más de 100 países, y se clasificaron en seis tipos diferentes de sistemas alimentarios (denominados 1-6 para evitar sesgos o preconcepciones); esto con el fin de generar un enfoque riguroso basado en las características locales de los países. En la elaboración de la clasificación se tomaron en cuenta las siguientes variables medioambientales y sociales: desempeño ambiental con relación al cumplimiento de los objetivos ambientales establecidos internacionalmente; autosuficiencia para producir alimentos; seguridad alimentaria; riesgos hídricos; puntos críticos de biodiversidad; lugares de carbono irrecuperable; y nivel de industrialización. Por otro lado, se elaboró un examen detallado de los siguientes países: México, Estados Unidos, Países Bajos, Sudáfrica, Pakistán, India, China y Filipinas. Después de realizar una revisión exhaustiva de la literatura y consultas con expertos, se identificaron acciones con el potencial de producir el mayor impacto en los sistemas alimentarios en el menor tiempo posible. Así, se propusieron seis grandes áreas de acción estratégica: manejo de recursos naturales; gobernanza e instituciones; educación y conocimiento; tecnología; comercio y finanzas. Cada una de estas áreas se dividió en una serie de palancas de transformación que suman en total veinte acciones. En el capítulo “México” participaron más de treinta especialistas mexicanos(as) -académicos de universidades de distintas regiones del país, investigadores de instituciones públicas, oficiales de gobierno, productores, integrantes de ONGs- quienes ubicaron a las siguientes cuatro palancas de transformación como las que tendrían el mayor potencial de impacto en el sistema alimentario nacional: