Plano General de la Ciudad de México 1866. Fuente: INEGI

El estudio de un producto cultural requiere un método que interrogue desde la sociología y responda desde la historia

Existe una correlación en los estudios literarios, la sociología y la historia. Cuando se estudia la literatura es necesario remitirse al proceso histórico de un país, como proceso social, cultural, de desarrollo, de cambio de ideas, afirmó Sara Sefchovich, investigadora del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (IIS-UNAM). Este enfoque permite observar los diversos Cortes etimológicos, que para la estudiosa de crónicas Susana Rotker, son los momentos que estructuran los comportamientos y los modos de pensar, explicó Sefchovich.

El estudio de un producto cultural, como la literatura, requiere un método que hace preguntas sociológicas y las responde con la historia, tanto social como cultural, la historia de las ideas, la historia de los hechos, un método que permite hacer cruces pluridisciplinarios, explicó la investigadora.

La corriente italiana denominada microhistoria ha tenido importantes repercusiones en las ciencias sociales. Este enfoque se caracteriza por trasladar un paradigma macro histórico para llevarlo al nivel micro histórico y, posteriormente, regresar al nivel macro para generar explicaciones, señaló Carlos Aguirre Rojas, investigador del IIS-UNAM.

El universo micro histórico tiene que ser un caso particularmente revelador de la totalidad macro histórica que estamos estudiando, para ello se deben buscar casos que escapen de la norma, ya que, para Carlo Ginzburg, la norma nunca es capaz de abarcar toda la inmensa variedad de los casos que ella debería incluir. Si partimos del caso que rompe la norma o que la transgrede, necesariamente estudiamos la norma y la anomalía del caso, lo que nos garantiza automáticamente que ese caso será revelador de la totalidad estudiada, explicó Aguirre Rojas.

Por su parte, Marta Eugenia García Ugarte, investigadora del IIS-UNAM, compartió sus reflexiones respecto a las aportaciones de la historia en las ciencias sociales, haciendo énfasis en la importancia de formar científicos sociales con una perspectiva histórica. Mi interés en este tema surgió porque consideré que era importante que los estudiantes de ciencias políticas y sociología reflexionaran sobre la manera de realizar sus estudios con fundamento histórico, señaló García Ugarte.

A través de un amplio recorrido por la literatura producida por no historiadores de España y la Nueva España en la primera mitad del siglo XIX, la investigadora afirmó que, aunque no se preocuparon por escribir una historia, sus trabajos manifiestan perspectivas del desarrollo del país o mundo que contribuyen con aportes novedosos que trascendieron su tiempo y se convirtieron en lecturas imprescindibles para conocer una época o un momento histórico.

Por otro lado, los nuevos sistemas de información geográfica, softwares que permite geolocalizar datos estadísticos, son herramientas importantes en los actuales estudios de historia urbana, afirmó Hira de Gortari, investigador del IIS-UNAM. A partir de una investigación histórica-territorial sobre el crecimiento de la Ciudad de México, el investigador explicó que la información geográfica permite hacer análisis espaciales muy detallados y facilita manejar grandes volúmenes de información para proporcionar una comprensión mas fina del espacio.

Estas reflexiones se llevaron a cabo durante el seminario Miradas de la Historia desde el IIS, realizado el 8 y 9 de mayo de 2019 y coordinado por Miguel Armando López Leyva, director del IIS-UNAM. En el seminario también participaron Julio Bracho, María Luisa Rodríguez Sala, Herbert Frey, Carlos Martínez Assad y Georgette José Valenzuela, investigadores del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM.

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