Técnico Académico del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM
En la pasada entrega revisamos las características de las cámaras fotográficas DSLR y mirrorles en el contexto de su uso para la documentación visual durante el trabajo de campo en ciencias sociales. En este segundo y último texto, continuaremos nuestra revisión abordando las cámaras compactas, los teléfonos inteligentes y nos detendremos en el problema de la falta de luz, uno de los principales desafíos a los que se enfrentan quienes investigan en campo.
3. Cámaras Compactas (Point-and-Shoot)
Las cámaras compactas o point-and-shoot son las más simples de usar y generalmente las más económicas. No ofrecen la flexibilidad de lentes intercambiables ni el mismo nivel de control que las DSLR o mirrorless, pero son extremadamente portátiles y fáciles de utilizar con funciones automáticas que permiten capturar imágenes sin necesidad de ajustes complejos, lo que puede ser una ventaja en situaciones de trabajo de campo que requieran rapidez.
- Ventajas:
- Fácil de usar: Estas cámaras están diseñadas para quienes no tienen conocimientos avanzados de fotografía, lo que las hace muy accesibles.
- Portabilidad: Son extremadamente ligeras y pequeñas, lo que facilita llevarlas a cualquier parte.
- Costo accesible: En comparación con las DSLR o mirrorless, las cámaras compactas suelen ser más asequibles.
- Fácil de usar: Estas cámaras están diseñadas para quienes no tienen conocimientos avanzados de fotografía, lo que las hace muy accesibles.
- Desventajas:
- Calidad de imagen limitada: Las cámaras compactas suelen tener sensores más pequeños, lo que afecta la calidad de las imágenes, especialmente en situaciones de poca luz.
- Opciones limitadas: No permiten un control manual total ni el cambio de lentes, lo que puede limitar la capacidad creativa y de adaptación a diferentes situaciones.
- Menor rendimiento en baja luz: Las cámaras compactas suelen tener dificultades para capturar imágenes claras en condiciones de poca iluminación.
- Calidad de imagen limitada: Las cámaras compactas suelen tener sensores más pequeños, lo que afecta la calidad de las imágenes, especialmente en situaciones de poca luz.
Reseña: Canon PowerShot G7 X Mark III
La Canon PowerShot G7 X Mark III es una cámara compacta premium que ofrece una buena combinación de portabilidad y calidad de imagen. Su sensor de 1 pulgada ofrece una calidad superior a la de muchas otras cámaras compactas, y su capacidad de grabación en 4K la hace atractiva para los investigadores que también necesitan capturar video.
- Pros: Compacta; buena calidad de imagen para su tamaño; grabación en 4K.
- Contras: Limitada en términos de control manual y lentes intercambiables; menor desempeño en condiciones de poca luz comparado con cámaras más grandes.
4. Smartphones, la herramienta del día a día
En los últimos años, los smartphones se han convertido en una opción cada vez más popular para la captura de imágenes en investigaciones de campo. Los modelos de gama media y alta, como el iPhone 15 o el Samsung 24, ofrecen cámaras avanzadas con múltiples lentes, capacidades de fotografía computacional y modos de disparo en condiciones de poca luz. Además, su portabilidad y facilidad de uso los hacen especialmente atractivos para investigadores que necesiten registrar el trabajo de campo de manera rápida y discreta. Para muchos investigadores, el smartphone es una opción accesible y versátil que elimina la necesidad de cargar con equipo fotográfico adicional.
- Ventajas:
- Portabilidad y conveniencia: Los smartphones son ligeros y siempre están a mano, lo que facilita capturar imágenes de manera rápida y espontánea.
- Edición y compartición inmediata: Los smartphones permiten la edición de imágenes directamente en el dispositivo y la posibilidad de compartirlas instantáneamente a través de internet o redes sociales, lo que es ideal para la colaboración en tiempo real.
- Modos avanzados de fotografía: Los smartphones modernos vienen equipados con modos automáticos que optimizan la calidad de la imagen, como el modo nocturno o el HDR (High Dynamic Range), que mejoran las fotos en situaciones desafiantes.
- Costo relativo: Aunque un smartphone de gama alta puede ser caro, la mayoría de las personas ya posee uno, lo que elimina la necesidad de invertir en una cámara adicional.
- Portabilidad y conveniencia: Los smartphones son ligeros y siempre están a mano, lo que facilita capturar imágenes de manera rápida y espontánea.
- Desventajas:
- Sensores pequeños: A pesar de los avances en fotografía computacional, los smartphones tienen sensores pequeños, lo que limita su capacidad para capturar detalles finos en comparación con cámaras DSLR o mirrorless.
- Menor control manual: Aunque los smartphones ofrecen más control manual que en el pasado, aún no pueden igualar el nivel de ajuste que permiten las cámaras dedicadas.
- Desempeño en poca luz: Aunque los smartphones han mejorado su rendimiento en condiciones de poca luz, aún tienen dificultades para igualar la calidad de imagen de cámaras con sensores más grandes.
- Sensores pequeños: A pesar de los avances en fotografía computacional, los smartphones tienen sensores pequeños, lo que limita su capacidad para capturar detalles finos en comparación con cámaras DSLR o mirrorless.
Reseña: iPhone 15 Pro
El iPhone 15 Pro es altamente valorado por su sistema de cámaras, que incluye un sensor principal de 48 megapíxeles, un teleobjetivo y una cámara ultra gran angular. Su rendimiento en baja luz ha mejorado significativamente y la capacidad de grabar en ProRAW ofrece flexibilidad en la postproducción.
- Pros: Excelente calidad de imagen para un dispositivo móvil; gran versatilidad; edición instantánea.
- Contras: Limitaciones en el control manual; menor rendimiento en comparación con cámaras profesionales en condiciones muy desafiantes.
El Desafío de la Poca Luz
Uno de los desafíos más comunes al utilizar cámaras en el trabajo de campo en ciencias sociales es la captura de imágenes en condiciones de poca luz. Los entornos interiores, las áreas rurales con poca iluminación o incluso la fotografía nocturna son escenarios que ponen a prueba el rendimiento de las cámaras y su capacidad para captar detalles claros sin generar demasiado ruido digital.
1. Desempeño de las DSLR en Poca Luz
Gracias a sus sensores grandes y su capacidad para operar en altos valores de ISO, las DSLR son la opción más adecuada para capturar imágenes en ambientes con poca luz. Además, permiten el uso de lentes con aperturas amplias (f/1.4, f/1.8) que capturan más luz, lo que mejora significativamente la calidad de la imagen en estos entornos.
2. Desempeño de las Mirrorless en Poca Luz
Las cámaras mirrorless, especialmente aquellas con sensores full-frame o APS-C, también ofrecen un buen rendimiento en condiciones de poca luz. Su capacidad para captar imágenes nítidas con niveles de ISO elevados es comparable a la de las DSLR. Sin embargo, al ser más compactas, algunas mirrorless pueden tener baterías más pequeñas, lo que puede limitar su uso prolongado en escenarios oscuros.
3. Desempeño de los Smartphones en Poca Luz
Los smartphones han avanzado significativamente en la fotografía nocturna gracias a la fotografía computacional. Utilizan técnicas como el apilamiento de imágenes para combinar varias exposiciones y generar una imagen más clara y brillante. Sin embargo, su rendimiento en condiciones de muy poca luz aún está limitado por el tamaño de sus sensores. Aunque un smartphone de gama alta puede ofrecer resultados sorprendentemente buenos en situaciones moderadamente oscuras, no puede igualar la calidad de imagen de una DSLR o una mirrorless con sensor grande.
Conclusión: Más Allá de la Tecnología, el lenguaje visual
Después de revisar los pros y contras de las distintas opciones de cámaras, queda claro que un smartphone moderno de gama media o alta puede cumplir con las necesidades tecnológicas de la mayoría de los trabajos de campo en ciencias sociales. Si bien las cámaras DSLR y mirrorless ofrecen una calidad de imagen superior y un control manual más avanzado, las mejoras en las cámaras de los smartphones han reducido considerablemente la brecha entre ambas tecnologías.
Con sus capacidades avanzadas de fotografía computacional, modos automáticos y edición en tiempo real, los smartphones permiten a los investigadores documentar su entorno de manera efectiva sin la necesidad de cargar con equipo pesado o costoso. Sin embargo, más allá de las especificaciones técnicas, lo verdaderamente crucial es que los investigadores desarrollen, conozcan y dominen el conjunto de códigos visuales (orientación de cuadro, composición, angulación, etc.), los cuales configuran el lenguaje visual.
Estos conocimientos posibilitan captar, analizar y comunicar de manera efectiva los aspectos más relevantes de su investigación. El dominio de la técnica fotográfica, la composición y el sentido crítico para seleccionar las imágenes adecuadas son habilidades fundamentales que definen la calidad y utilidad del material visual en las ciencias sociales ya que la calidad de la imagen no depende solo de las características de la cámara, sino fundamentalmente de la capacidad del fotógrafo para observar su entorno, componer la escena de manera adecuada y utilizar la luz disponible.
Podemos afirmar que, en el ámbito de las ciencias sociales, el principal problema para hacer fotografía expresiva y rigurosa durante el trabajo de campo no es la adquisición del equipo, sino la adquisición del lenguaje fotográfico. Por fortuna desde campos de especialización como la antropología visual, la sociología visual y el enfoque multimodal, con mayor frecuencia se organizan espacios formativos de alfabetización visual, uno de ellos es el taller “Fotografía en investigación social: introducción a la creación fotográfica”, el cual se ha llevado a cabo durante los últimos años como parte de las actividades de educación continua del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México.