A lo largo de su vida, Pablo González Casanova ha sido reconocido por sus colegas y las instituciones donde ha colaborado. Dentro de la academia, los movimientos sociales y los pueblos a los cuales ha apoyado, su participación es reconocida como relevante, señaló Luis Hernández Navarro, periodista de La Jornada, y agregó que, González Casanova se ha consolidado como uno de los intelectuales más importantes de América Latina, debido a su lucha y sobre todo por mantener su coherencia y reconocer sus propias contradicciones.

Las ironías de Don Pablo

Pablo González Casanova creció con muchas ironías, a una edad temprana no tenía gusto por el estudio pero posteriormente llegó a ser rector de la Universidad Nacional Autónoma de México y uno de los académicos más relevantes de la región. Pese a que en su juventud aprendió a boxear para defenderse de un acosador escolar, más adelante se convirtió en promotor de la paz y del diálogo para la solución de los conflictos, contó Hernández Navarro y agregó que, esas fueron algunas de las contradicciones que eligió y que lo llevaron a ser el gran científico social que es hoy.

Don Pablo y América Latina

En una primera arista, se ha reconocido a Pablo González Casanova por su importancia para la academia latinoamericana, esto debido a sus aportaciones en el análisis de las coyunturas de la región. Asimismo, se puede resaltar su participación en organismos dedicados a la institucionalización de las ciencias sociales latinoamericanas como la Asociación Latinoamericana de Sociología, la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, entre muchos otros más, expuso Sebastián Rivera, profesor investigador del Colegio Mexiquense.

Su mirada hacia América Latina se traduce en diferentes esfuerzos como el fortalecer los vínculos con la región mediante proyectos culturales durante su periodo como rector o el proyecto “Editorial Universitaria”, que es un trabajo de introspección latinoamericana creado para plasmar la visión de la realidad del continente, señaló Rivera. Esta última iniciativa es un ejemplo de que González Casanova no trabajaba únicamente con su visión, sino que buscaba hacer trabajos colectivos, por eso, a comparación de otros personajes, no busca protagonismo, si no que aspira a ser un soporte.

Don Pablo y los pueblos originarios

Una de las cualidades que más se destaca de González Casanova es su vinculación con los pueblos originarios y su lucha, resaltó María de Jesús Patricio Martínez, vocera del Congreso Nacional Indígena, y agregó que, dentro de sus aportaciones se encuentra el mostrarles la forma en la que el capitalismo afecta a las comunidades, les ha ayudado a entender que el despojo se disfraza de desarrollo y genera la violencia que viven día con día.

Es así, como el apoyo de González Casanova es fundamental para entender los procesos violentos generados por este sistema económico, y así, propone la reconstrucción de los pueblos, ya que el académico pone énfasis en que el capitalismo debe ser atacado mediante acciones locales para que el cambio pueda generarse hasta arriba. De tal forma, sus ideas han sido motivo de esperanza para las luchas, y a la par, se ha mantenido como un compañero, señaló María de Jesús Patricio.

A través de su caminar, Don Pablo Gonzalez Casanova reconoció las ironías de su recorrido que lo han llevado a formarse como el gran intelectual y luchador social que es ahora, señaló Luis Hernández Navarro, y agregó que, en todo ese andar ha mantenido un ideal de lucha por la vida misma, que más que una posición política, es un acto de coherencia.

Estas reflexiones tuvieron lugar en la cuarta mesa redonda, titulada “Pablo González Casanova: de la academia a la política”, que se llevó a cabo por videoconferencia el 14 de noviembre de 2022 y fue moderada por Raúl Romero Gallardo, Técnico Académico del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM.

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